Construidas en el Sáhara o donde sea, las pateras siguen su incesante conquista de las costas canarias. En 24 horas, 70 inmigrantes sin papeles fueron detenidos tras entrar en aguas jurisdiccionales isleñas en varias barcas. Por la mañana, la Guardia Civil detuvo a 31 inmigrantes en Fuerteventura, pocas horas antes de que fuera interceptada una patera con rumbo a la isla que llevaba a bordo a 35 personas más.
En Gran Canaria fueron detenidos otros cuatro inmigrantes que, a tenor de sus declaraciones a la Guardia Civil, llegaron en una pequeña embarcación de madera. Otros 31 adultos de origen subsahariano fueron detenidos en torno a las siete de la mañana de ayer en las cercanías de las Salinas del Carmen, en Antigua. Tras ser apresados por la Guardia Civil, fueron trasladados a la comisaría de Puerto del Rosario, en la que la Policía Nacional se encargará de los trámites de repatriación.
Después de ser avistados por un pesquero durante la madrugada, se interceptó una nueva patera a unas 18 millas de Fuerteventura en la que viajaban otros 35 subsaharianos.
