Un hombre de 52 años creó ayer cierto desconcierto en el Hospital de la Princesa de Madrid al entrar con un arma -que resultó ser simulada- y que fue detenido dos horas después cuando caminaba por una zona próxima, tras huir en un taxi mientras la Policía registraba el edificio.

Las puertas del hospital, que no fue desalojado, se cerraron durante aproximadamente la hora en que duró el registro "planta por planta", pero el individuo logró salir del centro sanitario sin ser visto, según señalaron los responsables del centro.

Según fuentes policiales, Plácido Antonio H.C., al parecer descontento con la atención hospitalaria prestada a un familiar, fue detenido por tenencia de armas prohibidas, al ser delito mostrarlas en público, aunque, como en este caso, sean simuladas.

A la entrada de la puerta de urgencias, pacientes y profesionales sanitarios que permanecieron en su interior durante el registro relataban el "susto" y la incertidumbre que habían vivido.

Una de las enfermeras del turno de noche explicó que incluso algunos compañeros planearon cerrar las puertas de su planta con vendas para evitar la entrada del presunto delincuente por una escalera, "por donde a veces se cuela gente".

Tres médicos del servicio de urgencias, de la guardia de noche, observaron sobre las 07.30 horas a un individuo que portaba un arma y que, tras asomarse al cuarto médico, salió huyendo sin amenazar ni pronunciar palabra, señaló el director del centro, Jorge Gómez Zamora.

Poco después, la Policía Nacional inició el registro y al no ser localizado una hora después se decidió permitir la entrada del personal facultativo y de los pacientes que se encontraban esperando en la calle.

Se avisó al 061 para que "no trajeran a nadie más hasta después del registro".

Entretanto, Plácido Antonio abandonó poco antes de las ocho de la mañana el edificio de La Princesa en un taxi y se dirigió hasta la plaza Manuel Becerra, a tan sólo 900 metros.

Durante el trayecto mostró el arma al taxista y le explicó que había entrado al hospital con ella porque "estaba enfadado" por la atención prestada a un familiar, según fuentes policiales.

Tras la identificación del sujeto, los agentes iniciaron su búsqueda por la zona y le localizaron. La policía le pidió que se identificara y comprobó que el arma era simulada y no ofreció resistencia cuando fue detenido. Ante los medios, el director de La Princesa señaló que el hospital es "absolutamente seguro", y afirmó que disponen de seguridad privada.