Por primera vez, la Iglesia de la Cienciología ha sido considerada culpable de "estafa en banda organizada". La justicia francesa emitió ayer una sentencia que condena a la organización a pagar una multa de 600.000 euros, pero optó por no prohibir su actividad. Un cambio en el código penal, realizado con gran discreción, impide la disolución de la secta --como se la considera en Francia--, como había solicitado el fiscal.

¿Los tentáculos de la Cienciología llegan hasta el Elíseo? El hecho de que en el 2005 Nicolas Sarkozy, siendo ministro del Interior, recibiera a Tom Cruise, uno de los embajadores ilustres del movimiento, resultó chocante en Francia. La versión oficial del Gobierno es que la reforma para simplificar el código penal no iba destinada a favorecer a la Cienciología.

La denuncia de una adepta presentada a finales de 1998 está en el orígen del juicio contra la organización. La justicia francesa acusaba a las estructuras de la Cienciología y a seis de sus responsables de haber sustraído decenas de miles de euros a sus antiguos adeptos haciéndoles comprar cursillos para rehacer su vida, libros, medicamentos y un aparato llamado electrómetro destinado a medir la "carga mental". El tribunal condenó a penas de entre 18 meses y dos años a cuatro responsables de la Cienciología en Francia. Consideró "más oportuna" una "fuerte sanción" económica que un cierre de la librería y el centro de culto de la Cienciología en París debido al "riesgo" de que la iglesia siguiera con sus actividades "fuera del marco legal".