El príncipe Joaquín de Dinamarca --hijo menor de la reina Margarita II y del príncipe Enrique-- y la princesa Alexandra han decidido separarse e iniciar los trámites de divorcio, según informó ayer la casa real danesa en rueda de prensa.

"Después de muchas deliberaciones, hemos decidido separarnos para pedir el divorcio. Estamos de acuerdo y queremos compartir la patria potestad de nuestros hijos", expresó la pareja en un comunicado leído por el mayordomo mayor. Joaquín, de 35 años, y Alexandra, de 40, piden "comprensión" ante su "difícil decisión" y manifiestan su voluntad de mantener sus deberes oficiales y la colaboración con las organizaciones con las que han trabajado.

NUEVAS RESIDENCIAS El príncipe Joaquín seguirá viviendo en la residencia de la pareja, en el palacio de Schackenborg (en el sur de Jutlandia), mientras que la princesa Alexandra vivirá "de momento" junto a sus dos hijos, los príncipes Nikolai y Félix, en el piso común en el palacio real de Amalienborg, en Copenhague. La reina Margarita y su marido mostraron su "profundo pesar" y su "apoyo total" a la pareja y sus hijos en un "periodo problemático", según el comunicado. El de Joaquín y Alexandra es el primer divorcio en la casa real danesa en los últimos 150 años.

EL NOVIO DE MOSQUERA Raquel Mosquera, viuda del boxeador Pedro Carrasco, ha encontrado de nuevo el amor. Cuatro años después de la muerte de su marido, Mosquera, de 35 años, presenta en la revista Lecturas a su novio, Tony, un economista nigeriano de su misma edad. "Quiero disfrutar la vida y cumplir mi deseo de tener hijos", afirma Raquel.

MADONNA ESPIRITUAL La cantante asistió ayer en Tel-Aviv a la conferencia del gurú de la Cábala, Eitán Yardein. La cantante encabeza una caravana mística formada por 2.000 acólitos de esta corriente del judaísmo que recorrerá lugares sagrados como las tumbas de los rabinos fundadores, la de la matriarca bíblica Esther --de la que ha adoptado el nombre-- y el Muro de las Lamentaciones. Madonna, que viajó a Israel tras cerrar su gira mundial en Lisboa, está acompañada por su marido, el cineasta Guy Ritchie.