TEtn provincias, triunfar en Madrid te convierte en sujeto periodístico. Si tienes una cadena de jamonerías en la capital, si sales en una teleserie... Cualquier atisbo de triunfo es suficiente para salir en el periódico de tu región con todos los honores. Es más, el buen periodista de provincias aprende enseguida que la mejor exclusiva es descubrir que la sobrina del frutero de la esquina tiene una sombrerería en Chueca donde se compran las boinas Nacho Duato y Luis Aguilé. Y lo del frutero de la esquina no es un dato baladí, sino el más importante de la información porque al lector, más que la destreza empresarial de la sombrerera de Chueca, lo que le interesa es conocer la respuesta a la pregunta del millón: "¿Y tú, guapina, de quién eres?". Y la sombrerera, que normalmente pasa de salir en el diario de su pueblo, te concede la entrevista más que nada por su tío el frutero, que se llenará de orgullo al ser felicitado por cientos de compradores de peras limoneras.

Cuando el humorista gallego Simón Cabido, o sea, Doña Croqueta, se retiró, se fue a vivir a mi barrio. Como había triunfado en Madrid, se convirtió en mi personaje de cabecera y practiqué con él la entrevista, la crónica, el reportaje, el informe, la columna y hasta la necrológica cuando falleció. Llevo casi 20 años buscando triunfadores madrileños de provincias y considero esa pesquisa todo un género periodístico. Es más, cuando deje de escribir, quiero que se me recuerde como el reportero que entrevistó a Los del Río en calzoncillos y descubrió que Miguel Ríos descendía de los Ibores.