La Policía Nacional ha practicado dos nuevas detenciones en relación con el tiroteo que el domingo costó la vida en Sevilla a Gaspar García, aunque el principal sospechoso, el padre de la niña a la que atropelló, sigue huido en la jornada en que la víctima ha sido enterrada en el cementerio de San Fernando.

Según informó ayer la Policía Nacional en un comunicado, uno de estos apresados, Juan Manuel S.A., de 30 años y con siete detenciones, se entregó a las 17.00 horas de ayer en una comisaria sevillana, acompañado de un abogado, y permanecía ayer en dependencias policiales.

Juan Manuel S.A., tío de la niña que resultó herida leve en el atropello, se encontraba asimismo implicado en el tiroteo que tuvo lugar el pasado 27 de diciembre en el asentamiento chabolista del Vacie, de donde procedía la familia, que llevaba diez días viviendo en un albergue propiedad de la Junta de Andalucía, en cuyas inmediaciones se produjo el crimen.

La segunda de las detenciones tuvo lugar en la zona de Los Bermejales, sobre las 0.45 horas, cuando Angel M.M., cuñado del padre de la niña, de 31 años y con dos detenciones anteriores, iba a retirar de la calle el vehículo que había utilizado para darse a la fuga tras producirse. La policía sigue con las investigaciones para dar con el paradero del padre de la pequeña, al que considera principal sospechoso.

ENTIERRO CON COLOR Por otro lado, unas 200 personas, entre familiares, amigos y vecinos, despidieron ayer en San Fernando a Gaspar García, de 64 años. Algunos compañeros de trabajo de este hombre, que estaba casado y era padre de dos hijos, lo recordaban como una "bellísima persona, trabajador e incapaz de hacerle daño a nadie".