LA POLICIA brasileña localizó ayer a dos sospechosos de sustraer 48,9 millones de euros (casi 8.000 millones de pesetas) al Banco Central, después de hacer costosas compras con dinero en efectivo el mismo día del robo. El dinero fue hurtado de la bóveda de seguridad del banco a través de un elaborado túnel subterráneo de 80 metros.