El temporal de nieve y lluvia en el centro y el sureste de Francia provocó ayer la muerte de dos personas y dejó a miles de abonados sin luz. La primera víctima, un suizo de 58 años, realizaba una travesía por la montaña cuando le sorprendió un alud y quedó sepultado. El otro, un automovilista de 50, perdió el control de su vehículo cuando circulaba por una carretera llena de nieve. El viento originó importantes daños en la red eléctrica. En seis departamentos del centro del país, 100.000 clientes se quedaron sin suministro.

En Estados Unidos, la tormenta de nieve afectó a 1,2 millones de hogares y empresas de Nueva York y Nueva Inglaterra. La meteorología obligó a cortar carreteras, retrasar trenes y cerrar las oficinas del gobierno de Maine. Según las autoridades, se trata del episodio que ha causado más estragos en los últimos 30 años.