A pesar de que el tiroteo de ayer no tiene precedentes en la zona, los vecinos de la comarca tenían claro que el asesinato de Juan Antonio Palmero Benítez y su compañero, José Antonio Vidal Fernández, es obra de una banda de albanokosovares.
Tras conocer el suceso, los vecinos comentaron que en la zona de Castejón, casi en la frontera con La Rioja, operan muchas bandas que trafican con drogas y con mujeres. En la carretera donde fueron tirotea- dos los agentes no abundan los clubs nocturnos, pero la prosti- tución es un negocio boyante en todo el sur de Navarra.
Los políticos que se acercaron hasta el lugar de los hechos también debían de tener claro el origen del suceso ya que en ningún momento pronunciaron la palabra atentado, sino asesinato.
La carretera donde se produjo el tiroteo está en una zona aislada. Apenas tiene circulación y no hay núcleos urbanos cercanos. Sólo hay polígonos viejos y bastante alejados. Los agentes no tenían escapatoria ya que la vía transcurre junto a terraplenes de unos dos metros.
El coche de los guardias civiles fue levantado por una grúa a las diez de la noche. Horas antes, se habían llevado los cuerpos. El vehículo tenía un fortísimo impacto en la parte delantera, la chapa estaba también destrozada por los balazos, al igual que las ventanas. Una enorme mancha de grasa en el suelo dejaba la marca.
