El dueño de la librería Europa, Pedro Varela, se ha entregado este viernes a la policía, después de que los Mossos d'Esquadra lo buscaran desde hace una semana por promover el odio y la discriminación, así como por hacer apología del nacionalsocialismo alemán y difusión de contenido nazi.

La policía emitió una orden internacional de búsqueda y captura después de que los Mossos d’Esquadra no pudieran dar con él tras el registro de su domicilio, que formaba parte de una operación contra laasociación cultural Ojeda, de la cual Varela es el vicepresidente.

Durante el registro, que también incluyó la inspección de la librería Europa y el local de ediciones Ojeda, la policía detuvo a cuatro personas relacionadas con la entidad investigada: al presidente, al terorero y a dos trabajadores de nacionalidad rumana, que quedaron el libertad con cargos. La policía catalana también intervino15.000 libros que justifican y enaltecen el genocidio judío.

LOS CARGOS

Tras siete días en paradero desconocido, Varela se ha presentado en el Juzgado de Instrucción número 9 de Barcelona junto con su abogado y se prevé que la Fiscalía solicite su ingreso provisional en prisión.

Los cargos presentados contra Varela son de delitos contra losderechos fundamentales y las libertades públicas y por uno deasociación ilícita. Además, la Fiscalía acusa a la entidad de presuntamente producir, elaborar, distribuir y vender material de apología nazi.

OBJETIVO RECURRENTE

El librero publicó este jueves por la noche en su cuenta de Facebook la intención de entregarse voluntariamente a las autoridades.

“La situación es bastante más complicada que en las ocasiones anteriores, puesto que mi casa ha sido destrozada, todos los medios económicos familiares retirados, la librería ha sido precintada, Ediciones Ojeda liquidada con la retirada de todos sus titulos (…). Mañana a las 10 de la mañana ingreso yo mismo en prisión”.

Varela es un viejo conocido de la policía y de la justicia por la difusión de contenidos de ideología nazi. Ha sido condenado dos veces por distribuir libros que hacen apología del nacionalsocialismo alemán y está pendiente de juicio por editar 'Mein Kampf' ('Mi lucha'), de Adolf Hitler, sin tener los derechos de la obra.