La Sección Octava de la Audiencia de Barcelona ha condenado a 13 años de cárcel a cada uno de tres cabecillas de la banda de los peruanos, especializada en atracos en las autopistas.

Los condenados, según la emisora Onda Rambla, son Miguel Mendoza, alias Ojitos y nacido en Cuba, el miembro de la banda que más detenciones acumulaba, Marco Antonio Herrera y Luis Alberto Román. Los dos últimos sí son peruanos.

Los delitos por los que han sido condenados son homicidio en grado de tentativa, tenencia ilícita de armas, hurto en grado de tentativa, resistencia a la autoridad, hurto de vehículo, además de lesiones y hurto en grado de tentativa. La banda de los peruanos alcanzó el clímax de su actividad delictiva en los 90 por sus continuos asaltos a turistas en la autopista A-7, a los que obligaban a detenerse advirtiéndoles de una falsa avería y luego robaban sus pertenencias aprovechando que las denuncias no prosperarían yaque eran ciudadanos de paso.

En mayo del 2000, los tres condenados dieron un salto cualitativo en su actividad criminal cuando dispararon contra un agente de policía para evitar su detención.