La genética y la genómica están desvelando que muchas enfermedades mentales, como la anorexia, la depresión o la esquizofrenia, están ligadas a factores genéticos, según el coordinador del Programa Genes y Enfermedades del Centro de Regulación Genómica de Barcelona, Xavier Estivill.

Estivill, que ayer clausuró la Semana Mundial del Cerebro, declaró a Efe que estudios hechos desde el punto de vista de la segregación genética en gemelos univitelinos apuntan a que estas enfermedades tienen un componente genético aunque, a diferencia de otras patologías genéticas como la fibrosis quística, en las mentales intervienen varios factores genéticos que se destapan en función de los factores ambientales.

Esto significa, según este experto, que en una sociedad o en un entorno determinado se puede desarrollar o no un transtorno, ya que muchos de estos genes son variantes de genes que todos llevamos y que tienen un peso distinto según los factores ambientales, lo que hace que sea muy difícil identificarlos.

También ha explicado que actualmente se están tratando de identificar -se han identificado ya centenares de miles de variantes del genoma que se pueden estudiar- y que, analizando muestras de paciente y controles muy bien caracterizados, se pueden poner distintas piezas al funcionamiento del cerebro y a esta enfermedades tan complejas.

Según Estivill, hasta ahora se han identificado variantes que participan en la susceptibilidad a las enfermedades psiquiátricas, pero la relación que tienen no es garantía de desarrollarlo, sino únicamente de riesgo.