El enfermero asesinado este domingo en su piso de la calle Ríos Rosas, en Madrid, será enterrado en el panteón de la familia García Galván en Mérida, tras recibir un funeral religioso en la concatedral de Santa María La Mayor de la capital extremeña a las 11.30 horas.

El cuerpo del enfermero, Angel G.R., de 52 años, fue hallado sin vida a primera hora de la mañana de este pasado domingo, y tras el levantamiento del cadáver, fue trasladado al Instituto Anatómico Forense, donde se le practicó la autopsia que determinará la causa exacta de la muerte violenta.

Por petición expresa de los compañeros de Ángel, su cuerpo fue velado en el Hospital Ramón y Cajal de Madrid, donde trabajaba. A las 12,35 horas de este lunes, la comitiva fúnebre dejó el hospital, camino de Mérida, acompañada con un fuerte aplauso del equipo sanitario del centro.

"Queremos agradecer el cariño y la solidaridad mostrada por el colectivo de enfermeros del Ramón y Cajal. Llevaba trabajando allí desde hacía 33 años y él lo consideraba como su casa", ha indicado a Europa Press el hermano de fallecido, Félix José.

La víctima fue hallada muerta en la mañana de este pasado domingo en el número 25 de la calle Ríos Rosas de la capital. Se le localizó en posición de cúbito lateral, desnudo, tapado con una alfombra y con varias heridas de arma blanca, informaron a Europa Press fuentes de la Jefatura Superior de la Policía.

La habitación donde fue hallado el cuerpo estaba revuelta y llena de sangre, pero el resto de la vivienda estaba en orden. En el lugar se encontraron también varios preservativos, pistas que apuntan a que, a priori, se trate de un crimen no planificado previamente.

De todas formas, el Grupo VI de Homicidios, que investiga los hechos, no descarta ninguna hipótesis. Por el momento no hay ningún detenido. El hecho de que la puerta y ventanas del domicilio no se hallaron forzadas indican que el autor esperaba o conocía al supuesto o supuestos asesinos.