La apertura a enmiendas de la LOMCE en el Senado será aprovechada por el PP para reforzar la presencia de la religión en el bachillerato, para que sea de oferta obligatoria, como lo es en primaria y la ESO, y satisfacer así la reivindicación de la Conferencia Episcopal Española (CEE). Ahora, es de oferta obligatoria en primero, en atención a los acuerdos con el Vaticano, pero la redacción actual de la ley Wert no lo deja claro.

"Habrá una enmienda porque los acuerdos internacionales deben cumplirse, pero su alcance no estará fijado hasta el jueves", comentaron fuentes parlamentarias del PP. El ala más conservadora del partido coincide con los obispos en que la regulación actual, sin asignatura alternativa, se traduce en que, según Educación, apenas el 23% de los estudiantes de primero de bachillerato en centros públicos acude a esta catequesis, frente al 73% de los privados. Además, el objetivo de la CEE es que se curse también en segundo. CCOO, UGT y el PSOE se oponen porque "acerca aún más al modelo al de un país confesional y al nacionalcatolicismo que propugna el PP".