Ni siquiera un giro moderado. El secretario y portavoz de la Conferencia Episcopal Española, Juan Antonio Martínez Camino, advirtió ayer de que la elección del nuevo presidente, el obispo de Bilbao, Ricardo Blázquez, supone "una renovación de talante, pero no un cambio de programa". Martínez Camino aludía así a aspectos que enfrentan a la jerarquía católica y al Gobierno, como la clase de Religión, el matrimonio homosexual, el aborto, el divorcio y la investigación con células madre.

El portavoz episcopal hizo este aviso tras la clausura de la asamblea plenaria del episcopado, que ha renovado la cúpula de la conferencia. No obstante, sólo han sido cambiado tres de los responsables de las 14 comisiones. El obispo de Segorbe-Castellón, Juan Antonio Reig, seguirá presidiendo Familia y Defensa de la Vida, una de las áreas que más controversia generan en las relaciones institucionales con el Gobierno.

En opinión del portavoz, la renovación se limita al cambio de personas, con otra edad, manera de ser y carisma, pero "la Iglesia tiene sus propios parámetros". "Aquí no hay partidos políticos ni grupos organizados para llevar adelante sus intereses".

"La elección de Blázquez no obedece a factores externos, ni a la conflictividad en las relaciones con el Gobierno. No es ninguna sorpresa. Responde a la continuidad institucional", insistió Martínez Camino.

CLIMA DE DIALOGO El portavoz de los obispos alabó el clima de diálogo con el Ejecutivo iniciado la pasada semana tras una reunión con la vicepresidenta, Teresa Fernández de la Vega. Pero dejó claro que los obispos mantendrán sus prioridades "de acuerdo con la verdad, el sentido y el estilo del Evangelio", por lo que no cabe esperar un cambio de postura en los temas clave que los enfrentan.

Martínez Camino explicó que está previsto que "próximamente, en unas semanas", Blázquez se reúna con el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, tal como acordaron en una conversación telefónica tras la felicitación del jefe del Ejecutivo. "Esta intención de celebrar un encuentro ya estaba planteada antes de las elecciones episcopales", señaló el portavoz.

La nueva cúpula de la CEE, según su secretario, defenderá en su reunión con el Gobierno el mantenimiento de los acuerdos entre España y el Estado de la Santa Sede (1976).