EEspaña está en la cola de la treintena de países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) en porcentaje de jóvenes de 18 años con un título de Bachillerato o FP de grado medio, un diploma que en el 2003 estaba en poder del 67% de la población de esa edad, 11 puntos por debajo de la media de los miembros de la OCDE. Pero, a la vez, figura en el pelotón de cabeza de los países en los que este indicador ha experimentado un crecimiento más rápido en los últimos 25 años. Por entonces, los poseedores de un título equivalente rondaban el 33% y España se hallaba 29 puntos porcentuales por debajo de la media.

Sólo Corea, Irlanda, Grecia e Italia han realizado más avances en ese periodo, aunque en todos los casos la situación de la que partían era mejor que la española. Aun así, sólo Polonia, México, Portugal y Turquía disponen de porcentajes más pequeños de población que consigue una cualificación académica preuniversitaria que España.

El último informe Miradas sobre la educación , que elabora anualmente la OCDE, presentado en París, incluye otros indicadores que reflejan el espectacular progreso de la educación española en las últimas tres décadas, desde el número de años en que la población es escolarizada hasta la cifra de titulados universitarios. El avance, de por sí notorio en esos dos terrenos, todavía lo es más si los datos se desagregan por sexos. Mientras las españolas que hoy cuentan entre 45 y 54 años acudieron durante 9,3 años a un centro docente, las que tienen entre 25 y 34 ya lo hicieron a lo largo de 12,5. Entre los hombres, ese parámetro se ha elevado, de una a otra generación, de 9,9 a 11,9 años. La mayoría de los integrantes de la OCDE han crecido por debajo.

LA MEDIA La universidad constituye un capítulo aparte. Ahí la estadística no sólo ha registrado un fuerte estirón, sino que España se ha distanciado de la media. Así, el volumen de población con estudios superiores (universitarios o asimilados, como diplomados en FP de grado superior) se dobló, aproximadamente, entre los años 1980 y 2000. De acuerdo con los datos difundidos, tras los coreanos, los españoles son los que han dado un mayor salto en esta etapa, por delante de franceses e irlandeses, que también han cosechado notables avances.

La estadística también ha detectado el progreso en el gasto educativo. España forma parte, junto a Australia, Grecia, Irlanda, Holanda, Polonia, Portugal y Turquía, del grupo de países que más han aumentado el gasto público por alumno.