España es el país de la Unión Europea que más incumple la obligación de ajustar las emisiones de gases contaminantes para cumplir los compromisos del Protocolo de Kioto, según denunció ayer la Comisión Europea. El aviso coincidió con la inauguración de la nueva cumbre de la ONU sobre cambio climático, esta vez en Milán.

La comisaria de Medio Ambiente, Margot Wallström, ha instado por carta a los gobiernos de la UE y de los futuros estados miembros a adoptar medidas suplementarias para que Europa pueda reducir en el 2010 en un 8% las emisiones de gases del efecto invernadero respecto a 1990, tal como se comprometió.

La tendencia decreciente en las emisiones de dióxido de carbono y los otros cinco gases responsables del calentamiento de la Tierra mantenida por la UE desde 1990 se invirtió en el 2000 y el 2001, fundamentalmente a causa del fuerte aumento de las emisiones del transporte.

"Si los estados no adoptan medidas adicionales en los próximos dos años será imposible cumplir el objetivo", advirtió Wallström. Sin esas medidas, las emisiones de la UE serán en el 2010 sólo un 0,5% inferior a las de 1990. España, pese a haber obtenido el derecho a incrementarlas en un 15%, superará el límite en un 33,3%, criticó Wallström. "Es el que peor comportamiento registra", añadió.

RUSIA NO RATIFICARA Rusia, por su parte, declaró ayer que no ratificará el protocolo de Kioto porque los compromisos derivados "obstaculizan el crecimiento económico" del país, según palabras de Andrei Illarionov, el asesor económico del presidente ruso, Vladimir Putin.

Putin expuso su rechazo al plan durante un encuentro con empresarios occidentales que se celebró ayer en Moscú. Inicialmente, el Kremlin tenía previsto que la Duma (Cámara baja) ratificara el acuerdo en septiembre pasado. Sin embargo, la posición rusa ha cambiado en los últimos meses, después de que el Kremlin decidiera condicionar la ratificación con la entrada de Rusia en la Organización Mundial de Comercio.