El Gobierno español realizó anoche la primera devolución extraordinaria a Marruecos de subsaharianos llegados a Melilla en los últimos asaltos a la valla. Se trata de un grupo de 70 inmigrantes, la mayoría originarios de Malí, que fueron transportados en ferry desde Algeciras a Tánger, según explicó el ministro del Interior, José Antonio Alonso.

Los inmigrantes llevaban ya unos días en la Península. Tras recibir la asistencia letrada correspondiente han sido devueltos, siguiendo los pasos previstos en la ley de extranjería. Marruecos se ha comprometido a repatriarlos a sus países de orígen --Malí y otros estado del Sahel--, según dijo la vicepresidenta del Gobierno, María Teresa Fernández de Vega.

Lo que parece estar en el aire, sin embargo, es la continuidad de las devoluciones. "Es una medida extraordinaria para una circunstancia también extraordinaria, por lo que no tiene por qué repetirse en las próximas horas", indicó la número dos del Gobierno.

SIN QUEJAS Fernández de Vega se mostró convencida de que, pese a las acusaciones de varias ONG acerca de que Marruecos está abandonando en el desierto a miles de inmigrantes y de que no tiene en vigor ningún acuerdo de repatriación con países subsaharianos, las devoluciones "se harán con total garantía". "No tengo queja hasta ahora del comportamiento de Marruecos", resaltó.

El Defensor del Pueblo, Enrique Múgica, recordó que la devolución de sin papeles se puede suspender si el inmigrante solicita asilo o es una mujer embarazada. Y avisó de que hay casos que "desaconsejan" la devolución. Reiteró que las devoluciones deben ser personalizadas.