La vicepresidenta María Teresa Fernández de la Vega, anunció ayer un acuerdo con Marruecos por el que éste aceptará de modo "excepcional", probablemente hoy, la devolución de inmigrantes subsaharianos llegados a Melilla y Ceuta en la últimas avalanchas. De la Vega no precisó ni a cuántos irregulares afectará ni si la medida tendrá continuidad en los próximos días.

Fuentes del Ejecutivo indicaron que el acuerdo, alcanzado por los ministros de Exteriores de los dos países, es el gesto que se estaba esperando de Marruecos y que el PSOE había reclamado públicamente en días pasados. "Con la devolución se manda el mensaje disuasorio a los inmigrantes de que saltar la valla es inútil porque a los pocos días pueden estar de vuelta a Marruecos", añadieron.

De la Vega explicó que paralelamente a estas "medidas excepcionales de devolución", se está "trabajando en la activación del convenio de readmisión" firmado por Marruecos el año 1992, pero que nunca se ha cumplido.

El documento prevé que el país vecino acepte la entrega de los irregulares que hayan llegado a España a través de su territorio, pero establece dos condiciones: que el inmigrante esté perfectamente identificado y que se pruebe que había pasado por Marruecos. El país vecino se niega hasta ahora aduciendo que, para ellos, ni Ceuta ni Melilla son España. Y alegan además que los subsaharianos nunca llevan documentación precisamente para evitar ser repatriados.

Si finalmente Marruecos acaba aplicando el convenio de 1992, la repatriaciones "excepcionales" anunciadas ayer por la vicepresidenta se habrán convertido en definitivas.

De La Vega, tras reunirse con los presidentes de Ceuta y Melilla en La Moncloa, viajó a ambas ciudades acompañada de la secretaria de Estado de Inmigración, Consuelo Rumí. Las visitas se producen después que el reprochara que ningún ministro se hubiera acercado a las ciudades autónomas y horas después de conocerse que el líder de la oposición, Mariano Rajoy, se personará allí el próximo domingo.

OTRAS ACTUACIONES El Gobierno avanzó aún más planes. Durante su comparecencia en el Congreso, el ministro del Interior, José Antonio Alonso, anunció la firma de un convenio de cooperación con Marruecos para poner en marcha "medidas sociales y de seguridad" relacionadas con la inmigración. El importe del protocolo ascenderá a más de 20 millones. Alonso, al igual que De la Vega, destacó también que el Ejecutivo "ha conseguido desbloquear" los 40 millones prometidos por la UE en el 2003 a Marruecos para mejorar el control de las fronteras.

Los presidentes de Ceuta y Melilla, Juan Jesús Vivas y Juan José Imbroda (ambos, del PP), utilizaron un tono más suave que el empleado en los últimos días para criticar la actuación del Ejecutivo. Entre otras cosas, hicieron hincapié en el "desencanto" de ceutís y melillenses por la "permeabilidad" de la frontera.