España, Mauritania y Mali han puesto en marcha un dispositivo de búsqueda por tierra y aire para localizar a los secuestradores de los tres cooperantes españoles y evitar que huyan a otro país, ha anunciado hoy el ministro de Asuntos Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, en la cumbre iberoamericana de Estoril (Portugal). El secuestro podría ser obra del grupo Al Aqeda en el Magreb Islámico (AQMI).

Los tres raptados son Albert Vilalta, director general del Túnel del Cadí; Alicia Gámez y Roque Pascual, que viajaban en el último vehículo de la caravana.

El Gobierno ha ofrecido a Mauritania aviones y helicópteros de la Guardia Civil que trabajan en el país africano en el control de la inmigración ilegal para participar en el dispositivo de búsqueda de los tres retenidos. Las gestiones las están llevando a cabo el secretario de Estado de Asuntos Exteriores, Ángel Lossada, y el secretario de Estado de Seguridad, Antonio Camacho.

Los presidentes de Mauritania y Mali también han acordado que las autoridades mauritanas puedan entrar en Mali "ejerciendo el derecho de persecución".

Vigilar el desierto

El ministro de Asuntos Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, ha destacado la complejidad de vigilar el desierto en el que se ha producido el secuestro, pero ha hecho hincapié en el total compromiso de los gobiernos de Mauritania y de Mali.

Moratinos ha afirmado que anoche conversó con el presidente de Mauritania, Mohamed Uld Abdelaziz, quien le dijo que las "huellas del vehículo" de los secuestradores "parece indicar que se trata de Al Qaeda".

Uld Abdelaziz ofreció a España toda la colaboración de las fuerzas de seguridad mauritanas y añadió que el objetivo es "evitar que puedan salir a otro país". El jefe de la diplomacia española ha comentado que también se ha puesto en contacto con el presidente de Mali, Amadou Toumani. Las autoridades de ese país, ha dicho Moratinos, permiten a las fuerzas de seguridad mauritanas que entren en su territorio si están participando en alguna operación de seguimiento.

A preguntas de los periodistas, el ministro de Exteriores ha afirmado que los captores no se han puesto en contacto con los ejecutivos ni con los familiares de los secuestrados.

Moratinos ha explicado que, a propuesta de la presidenta de Chile, Michelle Bachelet, la cumbre iberoamericana de Estoril (Portugal) emitirá un comunicado condenando el secuestro y "mostrando su solidaridad con el Gobierno y el pueblo español".

El Gobierno está intensificando las gestiones para intentar resolver el secuestro. Representantes del Gobierno han hablado además con los familiares de los secuestrados y con representantes de la oenegé Barcelona-Acción Solidaria, a la que pertenecen los retenidos.

Otros casos

Fernández de la Vega y Moratinos están en Estoril (Portugal) participando en una cumbre iberoamericana junto al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero. El Rey, que también asiste al encuentro, está informado desde el primer momento de todos los detalles.

Fuentes del Gobierno consultadas han confirmado, tal y como ha avanzado el ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, que se trabaja con la hipótesis de que el secuestro sea obra del grupo Al Qaeda en el Magreb Islámico.

Un grupo -recuerdan- que ya ha llevado a cabo acciones similares con otros ciudadanos europeos en la región donde han establecido vínculos con traficantes de la zona.

Evitar que huyan

El Ejército mauritano ha establecido como prioridad máxima impedir que los presuntos terroristas que han secuestrado a los tres cooperantes españoles consigan escapar a través del desierto a otro país vecino, principalmente Mali.

Fuentes de seguridad en Nuadibú han señalado hoy que unidades militares se han desplazado desde esta ciudad, la más importante del norte del país, para rodear a los secuestradores e impedir su fuga. Según las mismas fuentes, son tres los autores del secuestro, que tuvo lugar entre las siete y las ocho de la tarde del domingo en la carretera que une Nuakchot con Nuadibú.

El rapto de los tres cooperantes españoles se produjo cuando transportaban material de ayuda en un convoy formado por 13 vehículos que se dirigía a Dakar, la capital de Senegal.

El convoy humanitario ha llegado a la embajada española en Nuakchot, capital de Mauritania, tras ser escoltada por el Ejército, según ha explicado el director de la oenegé, Francesc Osan.

Veinte toneladas de material

La policía mauritana ya ha empezado a peinar la zona en el que anoche se produjo el secuestro de tres cooperantes cuando viajaban en una caravana de la organización Barcelona-Acción Solidaria con 20 toneladas de material humanitario.

Según ha informado un portavoz de esta oenegé, también está previsto que efectivos policiales españoles, que custodian habitualmente la embajada en Nuakchot, se unan a la policía de Mauritania y participen en la búsqueda de los tres desaparecidos.

No han pedido rescate

También ha asegurado que hasta ahora nadie, ni ninguna organización, se ha puesto en contacto con ellos, ni con las autoridades para reclamar algún tipo de rescate.

Ha relatado además que los secuestradores no se llevaron nada material de interior del vehículo en el que viajaban los tres cooperantes, y que el ordenador portátil que llevaban y toda la documentación estaba dentro.

Además ha contado que cuando el director de la expedición llegó hasta el vehículo asaltado, en compañía de un mosso d'esquadra que forma parte de la expedición, encontraron casquetes de bala en el suelo, pero que no había ningún impacto de arma de fuego en el vehículo.