Dinamarca abre el fuego de las bodas reales. Antes de asistir al enlace en Madrid del príncipe Felipe y Letizia Ortiz, los representantes monárquicos de todo el mundo se desplazarán a Copenhague, donde todo está a punto para la celebración, el viernes, de las nupcias del príncipe heredero Federico de Dinamarca con la abogada australiana Mary Donaldson. A la cita no faltarán Felipe y su prometida, quien será presentada ante la realeza mundial. Anoche ya asistieron a una cena de gala.

Por otro lado, en España, se ha creado el Movimiento Popular contra la Boda Real, que prepara manifestaciones. El colectivo rechaza al evento, que consideran un "grotesco, zafio y carísimo espectáculo de exaltación de los valores más reaccionarios".

También el mundo de la interpretación ha querido sumarse a la fiebre nupcial. La Unión de Actores convirtió el lunes su entrega anual de premios en una ceremonia de boda en toda regla. Hubo hasta lluvia de arroz. Las actrices Llum Barrera, Rosario Pardo y Mariola Fuentes ejercieron de presentadoras de la gala vestidas de novia lista para casar. "Como mayo se ha convertido en el mes de la boda, nosotras hemos aprovechado la ocasión".

ESCARCEO EN EL ASCENSOR La candidez de Scarlett Johansson ha causado perplejidad en Hollywood. La estrella de Lost in translation , de 19 años, ha confesado que agarró por la solapa a Benicio del Toro, de 37, lo metió en el ascensor del hotel Chateau Marmont de Los Angeles y, sin poderse resistir a llegar a la zona de habitaciones, uno y otro se enzarzaron ahí mismo en una tórrida actividad amatoria.

El cuerpo a cuerpo se produjo a la salida de una fiesta, en febrero. "Nos lo hicimos, o practicamos sexo, o lo que sea, ahí, algo que ciertamente es poco sano", ha declarado la intérprete.