Las señales emitidas por las estaciones base de la tercera generación de telefonía móvil, la llamada UMTS, pueden causar dolores de cabeza y náuseas, según un estudio dirigido por tres ministerios holandeses. El sistema, en fase de pruebas, aún no ha sido comercializado en España.

El estudio, el primero de su clase, comparó el impacto de las radiaciones emitidas por las habituales antenas de telefonía móvil y por las estaciones de la nueva red. El UMTS, que entre otros aspectos permitirá una transferencia constante de datos y de vídeo, transmite sus señales en una frecuencia más elevada.

Las estaciones base, que cubren generalmente un área de pocos kilómetros cuadrados, transmiten señales a los móviles mediante una radiación electromagnética. "En los tests, quienes estuvieron expuestos a las señales de la estaciones de 3G notaban un zumbar de oídos, tenían dolores de cabeza y se sentían con náuseas", dijo un portavoz del Ministerio de Economía holandés. No hubo impacto negativo con las señales de la actual red de telefonía móvil.

Sin embargo, las funciones cognitivas, como la memoria y el tiempo de reacción, aumentaron tanto en las señales de 3G como en las tradicionales. Las personas se mostraron más alerta cuando estuvieron expuestas a ambos tipos de radiación.

NECESARIOS MAS ANALISIS

Los ministros de Economía, Salud y Telecomunicaciones dijeron que era necesario confirmar los resultados y determinar los posibles efectos. El portavoz añadió que el estudio también será analizado por la Comisión Europea.

En las pruebas de laboratorio de doble ciego --ningún participante del estudio sabía si una estación estaba transmitiendo señales o no--, los voluntarios estuvieron expuestos a la intensidad media de radiación que tendrán los UMTS cuando se comercialicen. El estudio lo hizo el centro holandés TNO.

Las empresas proveedoras, como el consorcio GSM, afirmaron que aún no se ha demostrado ningún efecto perjudicial.