El refuerzo de la primera etapa de educación infantil figura en los programas electorales de las principales fuerzas políticas. El PSOE, por ejemplo, ha incluido la «universalización» a través de una red de recursos «integrada, pública y gratuita» entre uno de sus 35 compromisos sociales cara a las elecciones. Los programas de Podemos y el PP van en la misma línea, mientras que Cs propone impulsar los cheques guardería. De ahí que Save the Children se muestre esperanzada en que, si por fin hay un acuerdo de investidura, la próxima legislatura traiga consigo «cambios» que impulsen la educación más temprana.

Dado que la desigualdad de oportunidades en esta fase perpetúa el ciclo de pobreza, la oenegé pide a los partidos que reconozcan el derecho de todos los niños a su acceso, garantizando plazas gratuitas a los más vulnerables. Para ello, pide al Gobierno central que incluya una partida presupuestaria y establezca unos estándares comunes en cuanto a currículo, ratio y requisitos, que ahora no existen.