Euforia: capacidad de las personas para afrontar las adversidades; y estado de ánimo propenso al optimismo. Son las dos acepciones de la palabra que da título al último disco del grupo extremeño Tam Tam Go. Los hermanos Nacho y Javier Campillo, lejos de reflejar optimismo por cómo está la sociedad de hoy, en Euphoria, que así es como se denomina este trabajo, utilizan el sarcasmo para analizar en sus diez canciones "lo que está pasando en el panorama sociocultural español, con mucha crítica social y dando caña".

Cumplen veinte años de carrera musical y han querido empezar la promoción de este trabajo en Extremadura, su tierra, a la que se escapan desde donde estén cada vez que pueden para actuar o ver a los amigos. Además, "aquí no se vive nada mal, aunque es una gran desconocida y nosotros, a nuestra manera, nos encargamos de promocionarla", afirman. Por ello, están incluso pensando en instalarse en Mérida, ciudad en la que estuvieron ayer.

El nuevo disco combina rock chicano, música de los balcanes y, por su puesto, su manera de hacer pop, aunque "hemos mezclado más y hemos fusionado más que en otros", algo que no deja de ser un riesgo tal y como está el panorama musical, cuya industria "pasa por una crisis enorme, no así el talento".

Su disco Espaldas mojadas, en el año 1990, les lanzó a la fama en España, aunque ya había editado dos anteriores en inglés, y canciones como Manuel-Raquel levantaron entonces la voz en favor de colectivos como los homosexuales; la inmigración, en el caso de Espaldas mojadas; o la influencia de internet, con el tema Atrapados en la red. En este contexto, aseguran que siempre se han anticipado a situaciones ahora muy comunes "porque afortunadamente desde pequeños hemos viajado mucho y todas las cosas que cantábamos era porque las habíamos visto en otros sitios y hemos sido gente con mucha intuición a la hora de escribir".

Con las diez canciones de Euphoria no pretenden anticiparse a nada, sino "reflexionar sobre la cultura en general, sobre si lo estamos haciendo bien o no a la hora de consumirla".

Además, siguen muy unidos a lo que sucede en Extremadura, incluso han producido a un grupo que en breve saldrá al mercado, y el domingo tocan en Getafe con Luis Pastor, porque "nuestra región tiene muchas cosas y muy buenas", también en la música, con clásicos como el propio Pastor, Pablo Guerrero y ellos mismos, y nuevos artistas ya consolidados como Gecko Turner, Bebe y Soraya.

Han pasado seis años entre su último disco de estudio y este, pero el tiempo no les preocupa, porque "no sacamos un disco porque sí; tienes que vivir cosas muy diferentes al margen de la música para contarlas luego, pese a que la gente pueda pensar que has desaparecido".