Que se agarre bien a la silla Gisele Bundchen. La top brasileña deberá ir pensando en planes de jubilación ante el avance implacable de las modelos de los países del Este. Son las llamadas ovas de la moda: Eva Herzigova, Karolina Kurkova, Carmen Kass, (de izquierda a derecha en las fotos) Eugenia Volodina y Natalia Vodianova. Y esta temporada, la factoría eslava se está llevando todo el botín, que en su caso son esos contratos publicitarios que podrían retirar a la modelo y a todos los vecinos de su escalera.
Un vistazo al ranking de referencia del sector, la página www.models.com, da parte del poderío de las eslavas. Primera posición: la checa Karolina Kurkova. Segundo puesto: la letona Carmen Kass. Y completa el podio la rusa Natalia Vodianova.
La escalada de Vodianova ha seguido el típico guión del cazatalentos echa el ojo a jovencita que come una hamburguesa en el McDonald´s. Sólo que, en su caso, la hamburguesería era un mercadillo en el que hacía de frutera.
En la factoría del Este han repartido etiquetas. Vodianova cuelga con la de Lolita. Karolina Kurkova es el camaleón que tanto hace campañas para Chanel como para Pronovias. Carmen Kass es la chica lánguida que mira con cara de juguete roto. Eva Herzigova pasa por ser la veterana con cara de haber pasado mala noche. Y Eugenia Volodina es la rusa de mirada afilada con una carrera de relámpago. Un año atrás sólo la conocían en su barrio. En adelante, su rostro empapelará revistas y marquesinas en nombre de Gucci y el perfume J´Adore de Christian Dior.
Una misma pauta se repite en todos los casos. Las chicas quieren salir del país y ven que sus físicos son el mejor pasaporte. "Tienen mucha ambición y un aspecto diferente del europeo, más exótico --asegura Vanesa Rousad, de la agencia SSM--. Y se toman el trabajo muy en serio".
Tal es la rentabilidad del filón eslavo que los cazatalentos acuden a concursos que organizan agencias locales para encontrar un nuevo rostro llamado a ser la bomba. "Es nuestro particular Operación Triunfo ", se ríe Rousad.
