Los exdirectores generales de Caixa Penedès Ricard Pagès y Manuel Troyano se han negado hoy lunes a responder a los diputados en la comisión del Parlament que investiga la desaparición de las cajas para evitar salir perjudicados en el proceso penal que se sigue contra ellos en la Audiencia Nacional. Los dos exdirectivos de la caja que ha adquirido Banc Sabadell se han limitado a leer un escrito en el que eluden responder a los diputados para que "no se creen juicios paralelos" que puedan "influir" en el juez que los tiene que juzgar por un delito de administración desleal.
La Fiscalía Anticorrupción ha pedido tres años y medio de cárcel para Ricard Pagès por asignarse pensiones millonarias de forma irregular, mientras que ha solicitado otros tres años para Manuel Troyano. El fiscal considera que ellos, junto a otros dos exdirectivos, se adjudicaron 31,6 millones de euros en planes de pensiones y pólizas a espaldas de los órganos de control de la entidad.
Los portavoces parlamentarios individualmente han lamentado la actitud de los exdirectivos de las entidad financiera --que hoy desaparece formalmente, al integrarse en el Banc Sabadell--, de negarse a dar explicaciones en la cámara. En su mayor parte, han utilizado la situacion para dar a entender que esa actitud denota una presunta culpabilidad: "Quien calla otroga", comentó el portavoz del PSC, Juli Fernández. "Son ustedes presuntos chorizos con americana y cobarta, pero chorizos al fin", dijo el portovoz de ICV, Francesc Vendrell. Y resumió el portvoz del PP, Juan Antonio Coto: "Esperamos que la justicia actúa y si ustedes ha obrado de forma negligente paguen por ello".
VENTA DE UNNIM
Anteriormente ha comparecido en la misma comisión el presidente de la patronal Cecot y expresidente de Unnim en representación del FROB durante el periodo previo a la subasta de la entidad que constituyeron las cajas de Terrassa, Sabadell y Manlleu. Antoni Abad ha considerado que la adjudicación al BBVA fue una buena decisión que ha dado resultados positivos para los trabajadores de la entidad y para sus territorios de origen.
"La decisión del Banco de España de vender a BBVA fue buena, porque hoy sabemos que se ha hecho una buena integración de las dos entidades. La integración de plantillas se hizo desde el pacto y sin soluciones traumáticas. Y la proximidad del BBVA a estos territorios y a las nuevas fundaciones que se crearon es un elemento a destacar”, ha comentado Abad ante la comisión, en la que ha destacado que también los clientes ha salid ganado, particularmente en lo que se refiere al canje que se arbitró para las participaciones preferentes que se les vendieron.
El responsable de la patronal no ha querido señalar responsabilidades sobre el proceso que llevo a las cajas de Unnim a acabar en manos del FROB. Ha destacado, eso sí, que los directivos y órganos de gobierno “no evaluaron suficientemente la exposición al riesgo inmobiliario. No estuvieron colectivamente suficientemente acertados. La concentración de riesgo con la caída de la actividad económica y precipitó la caída”, ha destacado.
Abad ha destacado que fue elegido por el FROB como administrador en su calidad de persona relacionada con el territorio y que su función era la de canalizar la relación de la entidad con las instituciones y organismos del entorno territorial relacionado con las tres cajas. Para realizar esa función firmo un contrato por el que percibió 100.000 euros en un periodo de 12 meses.
