Un grupo de expertos españoles e italianos defendieron hoy en el Parlamento Europeo la declaración de la dieta mediterránea como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad, una reivindicación que ya ha sido presentada ante la UNESCO por España, Italia, Grecia y Marruecos.

La defensa de la candidatura se produjo durante un audiencia pública en la comisión de Agricultura de la Eurocámara en la que, por parte española, participaron María Dolores Rubio, asesora de la presidencia de la Comunidad Autónoma de La Rioja y el presidente de la Fundación Dieta Mediterránea, Lluis Serra.

Rubio se refirió a los orígenes de la dieta, que se remontan al neolítico con los primeros cultivos de trigo, vid y olivas, y defendió las bondades sanitarias de una alimentación "ligada a una forma de ver la vida".

El Director del Instituto Agronómico Mediterráneo de Bari, Cosimo Lacirignola, que también participó en el debate, incidió por su lado al peso de la cultura en una dieta que "a lo largo de los siglos ha sabido enriquecer su legado manteniendo su originalidad".

Por su parte, la eurodiputada socialista Rosa Miguélez, que ha propuesto ante la comisión de Agricultura una iniciativa para que se pronuncie en favor de la candidatura, señaló en un comunicado la contribución de esa dieta a "nuestra historia, nuestra reconocida gastronomía e incluso al mantenimiento de nuestros paisajes y medio ambiente".

La UNESCO se pronunciará sobre la candidatura en el segundo semestre de 2009.