Cuando parecía que la batalla judicial se le empezaba a poner a favor, la defensa de Michael Jackson ha encajado un nuevo revés: un exjefe de policía de Santa Bárbara denunció ayer que el cantante abusó de otro niño en 1993, año en que llegó a un acuerdo con un menor que lo había acusado del mismo delito. Con el anuncio del antiguo policía, Jim Thomas, ya son tres los casos por supuestos abusos contra el autoproclamado rey del pop . Según Thomas, la denuncia que investigó no llegó a los tribunales porque la víctima sentía vergüenza. Aun así, el testimonio fue grabado en un vídeo y podría testificar cuando se celebren las audiencias.

La nueva revelación abre otro frente en la defensa. En los últimos días, los abogados de Jackson se habían apuntado varios puntos a favor al lograr rebajar la hostilidad de los medios.