El agente forestal fallecido en el incendio de La Palma, Francisco José Santana, casado y con cinco hijos, era un "buen profesional, experimentado, cauto y muy cuidadoso" en cuanto a los riesgos que comportaba su trabajo, según le describen los sindicatos UGT y CCOO.

UGT, organización a la que estaba afiliado, ha trasladado ya sus condolencias a sus familiares y amigos, lo mismo que el Ayuntamiento de Telde (Gran Canaria), de donde era originario.

Por su parte, en nombre de CCOO, el agente forestal Luis Baute Alvarado ha recordado que el fallecido se dedicaba a un trabajo en el que se la "juegan" cada vez que se enfrentan "al fuego, a sus cambiantes condiciones, a la orografía y la vegetación, a los rigores de las temperaturas y de los vientos, así como al propio estado individual de cada uno".

"Nunca debemos olvidar que nuestro trabajo es así, y en esta ocasión la suma de todos los factores nos dejan sin esta magnífica persona", ha apuntado Baute.

Este sindicato considera que ya habrá tiempo para el análisis, para la búsqueda de las causas del origen del siniestro, de conocer y exigir las responsabilidades "para los que provocan y apoyan tanta destrucción".

"Ahora nos toca llorar esta pérdida, lamentar lo ocurrido, estar al lado de su familia, compañeros y amigos", señala el representante sindical.