El hijo de Ana María Campo, Jordi, murió atropellado por un conductor borracho. El suceso ocurrió en Barcelona el 24 de enero de 1998. Desde entonces, Campo --fundadora de Stop Accidentes-- no ha parado de luchar. Por su hijo y por los familiares de los otros 250 miembros de la asociación. Según sus datos, ningún culpable de esos 250 asesinatos ha pasado por la cárcel. Sólo el que mató a su hijo.

Por otra parte, Jordi Recasens tenía 35 años, mujer y dos hijos de 2 y 6 años. El 24 de enero de 1998, un conductor borracho lo atropelló y lo mató. El juicio tardó más de un año y medio. Finalmente, fue condenado a pasar dos años y medio en la cárcel.