Mientras los daneses cuchicheaban sobre el logotipo que ha diseñado la reina para la boda de Federico y la abogada Mary Donaldson, los novios reales se pusieron el chándal para, a miles de kilómetros, dar un bucólico paseo por un parque en la ciudad australiana de Hobart (ambos, en la fotografía).

La pareja, que se casará el próximo 14 de mayo, se encuentra en las antípodas para asistir a otra boda Donaldson: la de Patricia, la hermana de la futura reina de Dinamarca. Con este viaje, Federico y Mary cerraron el círculo iniciado cuatro años atrás, ya que se conocieron en los Juegos Olímpicos de Sydney.