Florentino Pérez vivió ayer por la tarde un baño de masas de esos que le gustan. El presidente del Real Madrid y de la tercera constructora de Europa cumplió con el rito católico de llevar a su hija al altar (ambos, ante la iglesia, en la foto superior izquierda). Y lo hizo rodeado de más de un millar de personas. Entre ellas, la crema y nata del PP, como corresponde a un íntimo de José María Aznar.
No estuvo el presidente del Ejecutivo, pero sí el vicepresidente Javier Arenas (en la foto inferior izquierda, con su esposa); la ministra de Sanidad, Ana Pastor; el de Fomento, Francisco Alvarez-Cascos, y el alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón. Del equipo contrario estuvieron el presidente de Castilla-La Mancha José Bono, el exministro José Barrionuevo y la excandidata socialista a la alcaldía de Madrid, Trinidad Giménez. Y de los que andan en el banquillo, el exportavoz del Gobierno Miguel Angel Rodríguez (foto inferior derecha) y el exdirigente de CiU Miquel Roca (foto central izquierda). El equipo galáctico estuvo representado por Figo (foto superior derecha) y Raúl (en el centro), acompañados por sus espectaculares esposas, Helen Swedin y Mamen Sanz.
IGLESIA DE LOS JERONIMOS
La ceremonia tuvo lugar a las 18 horas en la Iglesia de los Jerónimos, santuario de las familias bien de Madrid. La novia, María Angeles, de 26 años, llegó al altar "tranquila y sin nervios". Cuchi, como la llaman sus amigos, vistió un traje blanco de tirantes con el velo bordado. El novio, el abogado y empresario Jesús Martín Buezas (en la foto de abajo, en el centro), también lució su cara más radiante.
Tras la pertinente luna de miel, Cuchi y Jesús se instalarán en un piso alquilado al lado mismo del Bernabéu.
