TDticen que en el turismo extremeño la consigna publicitaria es ser agresivos. Este concepto tan vago puede acabar creando mensajes delirantes como el de las vallas del paleto o uno que escuché en una emisora de radio mientras cruzaba Miajadas. Me dirigía a la Feria de la Educación cuando sonó en el receptor la voz de una locutora que anunciaba un hotel rural de Berzocana destacando que estaba enclavado en medio de una naturaleza feroz y en un ambiente salvaje. Hombre, si no supiera que Berzocana es el pueblo cacereño de Luis Pastor, creería que estaban haciendo publicidad del Serenguetti o de una reserva keniata. Pero no, se trataba simplemente de una cuña agresiva que invitaba a visitar Berzocana como si se tratara de un safari al Kilimanjaro.
El caso es que crucé Miajadas por una nueva avenida que se hace pesadísima y llegué a Don Benito tras enloquecer en una decena de rotondas. De la Feria de la Educación me llamó la atención el pabellón dedicado a la Formación Profesional de Extremadura. No sabía que hubiera tantas especialidades, tantos alumnos, tanta dotación tecnológica. Me contaron que expertos de autonomías como la vasca, con tantos años de ventaja en la FP, se habían quedado sorprendidos con los avances de la Formación Profesional extremeña. Lo malo es que casi nadie lo sabe. La FP extremeña es puntera, pero se desconoce. No le vendrían mal campañas a lo Berzocana: "Triunfe en una oficina salvaje formándose como un administrativo feroz en la nueva FP de Extremadura".
