Francia puso ayer en marcha un amplio dispositivo policial para detener a dos presos, considerados peligrosos, que se escaparon ayer de una cárcel de Moulins, en el centro del país. Numerosos controles de carretera han sido instalados por el país, mientras que dos helicópteros buscan a los fugados desde ayer, tiempo en el que han robado varios de coches y secuestrado a varias personas.

Christophe Jider, condenado a cadena perpetua por un secuestro que acabó con la muerte de un rehén, y Top El Hadj, que cumplía pena hasta el 2020, escaparon gracias a un explosivo permitió abrir la puerta y, en la confusión, los reos lograron arrebatar el arma a un vigilante, al que tomaron como rehén para dejar la cárcel.