Cautela y prudencia son las palabras que más maneja el Gobierno español cuando se refiere al secuestro de los tres voluntarios españoles. Lo mismo hace el francés en relación a Pierre Camatte, el cooperante compañero de secuestro de los catalanes. No se acaban aquí las coincidencias. Ayer, fuentes del Ministerio de Exteriores galo indicaron que se pondrá en marcha un dispositivo de colaboración con España para compartir información y actuar de forma coordinada a fin de lograr la liberación de los cuatro secuestrados.

Fuentes socialistas españolas consultadas al respecto consideran absolutamente lógica y razonable la cooperación de la que habla París. En este sentido, se citan posibles ámbitos de colaboración tanto en lo referente al intercambio de datos entre los servicios de información de ambos países, como en el despliegue de operaciones militares.