La muerte del cooperante Vicente Ferrer ha disparado el número de apadrinamientos de niños indios, superando todas las previsiones que la fundación que lleva su nombre había realizado. Si antes de su muerte se registraba una media de 10 altas al día, tras su óbito el 19 de junio, se han alcanzado 77 por día, es decir, un aumento del 800%.

En tres semanas, 1.526 personas han apadrinado a 1.624 menores, según fuentes de la Fundación Vicente Ferrer. 206 ciudadanos más se han apuntado al programa De mujer a mujer , dirigido a las mujeres de las zonas rurales de Anantapur y que les permite disponer de una cartilla de ahorro personal. Otras 276 personas se han convertido en socios colaboradores.