La vacuna contra el virus del papiloma humano (VPH), responsable del 70% de los tumores de cérvix o cuello de útero, el segundo cáncer más frecuente entre las mujeres jóvenes, está ya casi en la farmacia. El Consejo de Ministros autorizó ayer su comercialización en España a partir del 1 de septiembre y anunció que tramitará su inclusión en el calendario de vacunación y la financiación por el Sistema Nacional de Salud. Es previsible que el próximo Consejo Interterritorial de Salud, que se celebrará en octubre, dé luz verde y asuma el gasto de esta novedad terapéutica puesto que ya cuenta con apoyo de la mayoría de las comunidades autónomas.

La vacuna contra este cáncer, que afecta cada año a 2.100 españolas y causa la muerte a 750, ya se comercializa en Alemania, el Reino Unido, Bélgica, Francia o Dinamarca. La decisión del Ministerio de Sanidad, según explicó ayer la vicepresidenta del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, responde también al cumplimiento de una proposición no de ley aprobada en junio en el Congreso, y a la eficacia avalada por estudios científicos y ensayos clínicos hechos en Estados Unidos y países europeos, incluido España.

Sin embargo, el elevado coste ha pesado antes de dar el empujón definitivo a la autorización, ya que el Ministerio de Sanidad siempre ha sido partidario de que tenga financiación pública. Otros países europeos que la han autorizado no pagarán el tratamiento completo. Es una de las vacunas más caras y el precio de las tres dosis necesarias puede alcanzar los 600 euros.

COSTE MILLONARIO La comisión interministerial de precios de los medicamentos abordará el coste en la reunión que celebrará la segunda quincena de septiembre. Los técnicos calculan que la administración a todas las españolas de entre 11 y 14 años costaría más de 60 millones de euros.

El VPH es un virus que se trasmite por vía sexual y su infección está relacionada con otros tipos de cáncer, como el de ano, vulva, vagina y, probablemente, con tumores de pene y de la cavidad oral. Por esta razón, representantes de distintas especialidades vienen reclamando desde hace un año la autorización de la vacuna y la inmunización universal a todas las niñas de entre 11 y 14 años, antes de que tengan relaciones sexuales.

Alfonso Delgado, presidente de la Asociación Española de Pediatría, recordó ayer que una vez iniciadas en el sexo la protección frente a papilomas no es posible "ni usando preservativo". Los expertos son partidarios de que en una segunda fase la vacunación se amplíe hasta los 26 años.