El frente contra el tabaco llega a la hostelería y al trabajo con una mayor contundencia de la anunciada. El proyecto de ley que prepara el Gobierno limitará el consumo en el 70% del espacio de bares, cafeterías y restaurantes de más de 100 metros cuadrados. Los dueños de los locales menores podrán decidir si se fuma o no pero deberán anunciarlo de manera visible. El borrador, presentado ayer por la Ministra de Sanidad, Elena Salgado, establece la "prohibición total" en centros de trabajo públicos y privados, así como en centros docentes y deportivos.

Los lugares de trabajo, según el proyecto, no podrán habilitar zonas para fumadores. Esta posibilidad sólo queda abierta para comercios, teatros, cines y otros espectáculos en espacios cerrados y aeropuertos. "Para salvaguardar la salud pública lo más razonable es que no se fume dentro de las empresas. En ninguna zona", defendió Salgado.

No obstante, la ministra admitió que el proyecto puede sufrir transformaciones durante el debate parlamentario que se iniciará a principios del 2005. "La norma está hecha para que se deje de fumar, no para proteger los derechos de los fumadores", advirtió Salgado.

DESDE ENERO DEL 2006 En cualquier caso, las zonas de fumadores en los recintos autorizados deberán contar con una separación física del resto de las dependencias, estar dotadas de una ventilación adecuada y no ubicarse en zonas de paso. La ley, que el Gobierno prevé que entre en vigor el 1 de enero del 2006, afectará de lleno a unos 100.000 de los 300.000 establecimientos hosteleros que hay en España. "Esta cantidad tan elevada hacen imposible extender la obligación o prohibición y su control. Hay pueblos que sólo tienen un bar", avisó la titular de Sanidad.

La ley prohibirá en toda España la venta e incluso la "entrega" de tabaco a los menores de 18 años, como ya hacen algunas regiones. Tampoco se podrá vender en todos los lugares en los que está prohibido su consumo.

El Gobierno prevé adelantar a julio del 2005 el veto total de la publicidad del tabaco en todos los medios de comunicación y soportes, su reparto gratuito y el patrocinio de actos y eventos.

Para todas estas infracciones el anteproyecto fija sanciones, cuya recaudación podrá destinarse por las comunidades autónomas para financiar políticas para dejar de fumar.

Además, "su cuantía será fijada al final del debate, pero en cualquier caso serán contundentes y ejemplares, sobre todo en casos de infracciones reincidentes", adelantó Salgado en conferencia de prensa.

APOYO REGIONAL Las medidas anunciadas por la ministra de Sanidad, Elena Salgado, cuentan con la aprobación del Consejo Interterritorial de Saud Pública, integrado por todas las comunidades autónomas, que son las encargadas de concretar su aplicación.