Las ministras de Agricultura, Elena Espinosa, y de Sanidad, Elena Salgado, insistieron ayer en que los controles puestos en marcha por España ante el riesgo de que se detecten aves con gripe aviar son estrictos, y garantizaron de nuevo que el consumo de carne de pollo es "absolutamente seguro".

Hoy se reunirán responsables del Ministerio de Agricultura y de las Comunidades Autónomas para revisar las medidas que se han adoptado.

Salgado, en declaraciones en los pasillos del Congreso, subrayó que las precauciones adoptadas son "extremas" y explicó que la situación española es distinta a la de otros países europeos que han decidido el encierro de las aves, ya que en España se cría en recintos cerrados.

Las zonas de riesgo españolas son los humedales y, como recordó hoy Espinosa, en los 25 considerados sensibles, ya se han encerrado a las aves en un radio de 10 kilómetros para evitar el contacto con las aves migratorias, especialmente las procedentes de Africa.

SANIDAD ANIMAL Espinosa insistió en que no existe ningún riesgo en el consumo de ave, afirmación que ratificó la titular de Sanidad, quien recalcó una vez más que la gripe aviar "de momento no supone ningún riesgo para la salud de las personas", porque es un problema de "sanidad animal".

Recordó en este contexto que no se conoce ningún tipo de infección de gripe aviar por ingerir carne de pollo y que el virus se destruye a una temperatura de 70 grados. En esa línea, el presidente de la Interprofesional del Pollo, Federico Félix, reiteró que los consumidores no deben preocuparse, porque "no hay ningún tipo de riesgo", y subrayó que la producción española se centra en establecimientos cerrados "a los que no puede acceder ningún agente contaminante".

No obstante, desde Cataluña, los productores de aves y el responsable del Centro de Sanidad Avícola de Cataluña y Aragón recordaron que hay aves "ecológicas" y se mostraron partidarios de confinar a todas las aves, no sólo en las zonas de riesgo, como medida de precaución "barata, sencilla y práctica".

Parecida opinión mantiene el Ayuntamiento de Valencia, que, como hoy explicó su concejal de Sanidad, ha decidido trasladar a los cerca de doscientos patos que habitan en los parques y jardines a zonas controladas, para evitar riesgos ante un posible contagio de gripe aviar.

Mientras, en Ceuta, fuentes policiales informaron a Efe de que la policía local, también como medida de precaución, ha incrementado esta semana los controles sobre la venta ambulante para evitar que se comercie ilegalmente con productos procedentes de Marruecos.