Hay que frenar la revuelta antiBolonia . Con este objetivo, el Gobierno se comprometió ayer con los 76 rectores de las universidades españolas a poner en marcha una campaña para "comunicar mejor", según la ministra de Ciencia, Cristina Garmendia, las ventajas de la reforma, que implica modificar las carreras para hacer homologables los estudios con Europa. La estrategia de comunicación, que será diseñada y concertada por varios ministerios, autonomías y las propias universidades, resaltará los aspectos más positivos del plan de Bolonia. Tendrá como eje central que la reforma es el único camino hacia una educación moderna, universal y de futuro, ya que permitirá trabajar en 46 países (los 27 de la UE y otros que se han unido). También insistirá de una manera "más clara e inequívoca" en que con la reforma se ganará en eficacia académica, que no supondrá un mayor intervencionismo de las empresas y que tanto los estudios de grado como los de máster serán accesibles a todos mediante becas y ayudas al estudio.

DIALOGO El plan de comunicación, según acordó el Consejo de Universidades, irá acompañado de un periodo de diálogo, debate y consultas sobre temas que afectan a los estudiantes. Garmendia y los rectores mostraron un "apoyo total" a las universidades afectadas por la revuelta, como la Autónoma de Barcelona y la de Valencia. "No pueden admitirse las acciones violentas ni las actitudes de aquellos que pretenden desdeñar los mecanismos democráticos que legítimamente rigen su funcionamiento", subrayaron en un comunicado conjunto.

El Consejo admite que la adaptación de las titulaciones al Espacio Europeo es una tarea compleja, y reconoce el esfuerzo de la comunidad universitaria en este aspecto. Hasta la fecha, se han tramitado en el Consejo de Universidades "cerca de 700 memorias de solicitud de títulos de grado".