El ministro de Administración Interna de Portugal, Eduardo Cabrita, declaró ayer «controlado», tras 70 horas, el gran incendio que comenzó en el sábado en Castelo Branco (región Centro) y agradeció la rápida respuesta de España a la petición lusa de enviar medios aéreos.

«Transmití hoy [por ayer] los agradecimientos a mi homólogo en España, el ministro de Interior, por la rápida respuesta del lunes, tras el pedido de apoyo al inicio de la tarde. Dos horas después, había un par de hidroaviones actuando aquí», manifestó Cabrita durante su visita en la tarde de ayer a Cardigos.

El ministro quiso zanjar la polémica abierta sobre la gestión de los equipos de extinción ante estos incendios y afirmó que «la respuesta en primer lugar es responsabilidad del que está más próximo, los bomberos locales, y de los coordinadores municipales de Protección Civil».