Sólo los rebrotes de coronavirus de Aragón, Málaga y, en menor medida, Cantabria preocupan al Gobierno porque entrañan "cierto nivel de riesgo". Los dos primeros por su volumen, con 250 y 89 casos respectivamente, y el tercero, de solo seis casos, porque aún no han podido rastrearse los contactos, según ha explicado este jueves el director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias, Fernando Simón.

El riesgo no es elevado. En el primer caso, afecta a temporeros de la recogida de la fruta de cuatro comarcas de Huesca y Aragón, el 95% de los cuáles ni siquiera han dado síntomas de padecer el covid-19 y, por tanto, tienen un potencial de contagiar pequeño. La gran capacidad de que disponen la comunidades para efectuar pruebas a los contactos estrechos de los enfermos provoca la detección de muchos casos que de otra manera hubieran pasado desapercibidos.

EL CONFINAMIENTO

Si el gobierno de Aragón detectara la existencia de transmisión comunitaria descontrolada podría solicitar el confinamiento de las áreas afectadas. Esta decisión está en estudio, pero tiene que "estar muy bien fundamentada" porque sin el estado de alarma en vigor "debe ser ratificada por un juez", advirtió Simón. Por el momento las cuatro comarcas han retrocedido a la fase 2 de la desescalada.

En el caso de Málaga, al tratarse de una población recluida en un centro de acogida y atendidos por personal especializado de la Cruz Roja, "acostumbrados a lidiar con situaciones similares", también es pequeño el peligro de que se extienda.

Este foco partió de un trabajador del Centro de Acogida de Emergencia y Derivación de Cruz Roja, que habría realizado un viaje en fechas recientes, según algunas fuentes a Canarias. Tras confirmar el positivo con una prueba PCR, surgió un nuevo positivo, por lo que se procedió a confinar el inmueble, situado a las afueras de la ciudad y en el que residen desde inmigrantes llegados en patera a demandantes de asilo.

Según indicó la delegada de la Junta en Málaga, Patricia Navarro, "se están haciendo pruebas a quienes están en el centro y también estudiando la trazabilidad del contagio", por lo que el foco aún está en fase de investigación. Además de los infectados, hay aislados y bajo seguimiento un centenar de personas, clasificadas en función de si han tenido contacto directo o no con los afectados, informa Julia Camacho.

LA MAYORÍA SON JÓVENES

Tanto en Málaga como en Aragón, la mayor parte de los afectados, son además, jóvenes, con un potencial de transmisión de la enfermedad que también es limitado.

En Cantabria el grado de incertidumbre es más alto, al tratarse de un caso muy reciente, que se conocido este mismo jueves, pero en contrapartida tiene un volumen pequeño, de solo 6 casos, al menos por ahora. Está asociado a dos pisos de un mismo bloque de vecinos.

El mensaje de Simón frente a la inquietud que ha generado la aparición de rebrotes en toda la geografía española es de tranquilidad. "El que hablemos de brotes y no de transmisión comunitaria indica que estamos bien", ha señalado.

BAJAN LOS CASOS DIARIOS

Los datos del ministerio revelan que en las últimas semanas se han detectado 40 brotes, de los cuáles están activos y generan nuevos casos 18, pero sólo los tres citados anteriormente entrañan riesgo. En el conjunto de España el número de nuevos contagios contabilizados ayer fue de 157, unos 40 menos que el miércoles, mientras que las muertes cayeron a 10 en los últimos siete días.

Del resto de brotes destaca por la alarma que ha causado el de Navalmoral de la Mata (Cáceres) al haber desaparecido y hallarse en busca y captura el paciente 0 que lo originó.

MEJOR NO HACERSE PRUEBAS

Simón desaconseja hacerse un test contra el coronavirus para ir a ver a un familiar. "No aporta mucho, hay pensárselo dos o tres veces antes de hacerlo", indicó. En su opinión, las pruebas pueden ser hasta contraproducentes, si dan un resultado negativo porque es la fotografía de un momento concreto y pueden proporcionar una falsa sensación de seguridad. Al día siguiente se puede haber desarrollado la enfermedad.