El director general de la Guardia Civil, Félix Azón, afirmó ayer que la institución trabaja «a mil por mil» para que la investigación sobre la muerte de Julen al caer a un pozo enTotalán (Málaga) esté terminada «en días» porque «toda la sociedad española está esperando el resultado» de estas pesquisas. Al ser preguntado si la investigación apunta a que la muerte del pequeño Julen pudo tratarse de un homicidio imprudente, Azón indicó: «Todos estamos pensando que no puede ser otra cosa, presuntamente».

Pero corresponde a la autoridad judicial, en este caso el Juzgado de Instrucción número 9 de Málaga, «tomar las decisiones que correspondan, añadió Azón.

Azón asumió ayer que hay «miles» de pozos en España, que espera que estén «controlados» y bien protegidos por sus propietarios. Se refirió a esta cuestión al ser preguntado sobre el hallazgo del cadáver de un hombre de 45 años en el interior de un pozo la madrugada de ayer en Villanueva del Trabuco (Málaga), dos días después de que se sacara el cuerpo de Julen del pozo de Totalán.

«Todo parece que ha podido ser un accidente», señaló el director general del instituto armado, que confía en que no ocurran más sucesos de este tipo.

Pozos ilegales como el de Totalán (Málaga) en el que cayó Julen hay miles en Andalucía, y su control administrativo es complejo porque se divide entre las administraciones autonómicas y central, con intervención de la Fiscalía cuando se comete un delito.

La Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG), que abarca casi toda Andalucía, tiene contabilizados en los últimos dos años 943 expedientes administrativos por prospecciones ilegales de agua subterránea. Muchos de estos pozos, tras ser precintados, se vuelven a abrir porque los sellos no son eficaces.