Los guardias civiles de la aduana del aeropuerto de Málaga que cobraban sobornos para hacer la vista gorda a pasajeros recién llegados indicaban a sus víctimas que depositaran el dinero, normalmente 50 euros, en el interior de sus gorras que estaban depositadas en el mostrador.

Miembros de la comunidad china afincados en la Costa del Sol --que llegaron a avisar a sus compatriotas de que tuvieran preparado el dinero si viajaban a Málaga-- explicaron ayer que los agentes desconocían su idioma y se dirigían a ellos por signos. Así, les indicaban con gestos que debían depositar el billete de 50 euros en la gorra mientras se supone que revisaban las maletas. A algunos incluso les llegaron a cobrar más 100 euros por dejarles introducir regalos y comida.

El Juzgado de Instrucción 6 de Málaga dejó en libertad sin fianza, aunque imputados de un supuesto cohecho, a 14 de los 19 detenidos. Los cinco restantes ingresaron en un módulo especial para miembros de las fuerzas de seguridad del Estado de la cárcel de Sevilla al ser considerados los cabecillas de la banda.

Un tercio de la plantilla de la unidad fiscal en el aeropuerto estaría implicada en el cobro de pequeñas cantidades --generalmente 50 euros-- a ciudadanos extranjeros, en su mayoría de origen chino, por "hacer la vista gorda" y agilizar u omitir trámites administrativos en la aduana, una "práctica habitual" durante los dos últimos meses, según la investigación.

También se llegó a cobrar a turistas comunitarios por realizar trámites inexistentes o no retener las maletas, según explicaron algunos trabajadores del aeropuerto, que apuntaron que esta conducta era conocida en las instalaciones, aunque no consta ninguna denuncia. La Asociación Unificada de la Guardia Civil aseguró que el escaso sueldo pudo ser "caldo de cultivo" para cometer el delito.