EL CADAVER del informático de Tres Cantos (Madrid) fue encontrado en un descampado próximo al circuito automovilístico del Jarama. Francisco Quintana, de 38 años, salió de su casa el pasado jueves en bicicleta de montaña para dar una vuelta de unas dos horas pero no regresó. Los investigadores de la Guardia Civil creen que fue atropellado.