Un buscador profesional llegado desde Alemania, Thomas Grau, ha localizado al menos cinco pequeños fragmentos o meteoritos del espectacular bólido que atravesó los cielos de Castilla-La Mancha el 10 de mayo, según informó ayer el coordinador de la búsqueda, Josep Maria Trigo, investigador del Instituto de Ciencias del Espacio (ICE-CSIC) y del Instituto de Estudios Espaciales de Catalunya (IEEC). Los fragmentos, que corresponden a una acondrita, un grupo raro de meteoritos de formación relativamente joven, fueron localizados en un paraje que se mantiene en total secreto para evitar expolios. Ni siquiera ha trascendido el día exacto del hallazgo. "Esperamos encontrar más meteoritos y de mayor tamaño", confía Trigo.

Nada más anunciarse el avistamiento, Grau se puso en contacto con la Red Española de Investigación sobre Bólidos y Meteoritos para iniciar la búsqueda. Se trataba de ir a la zona donde se esperaba que hubiera impactado y rastrearla. A cambio de las pistas, se comprometió a ceder a España parte de sus tesoros. Y los frutos del trabajo son cinco piezas de unos cuatro centímetros de largo y entre 5 y 10 gramos de peso.