Un consorcio internacional en el que han participado 65 investigadores de hospitales de todo el mundo ha identificado una región cromosómica del cuerpo humano que predispone e incrementa el riesgo de sufrir cáncer de pulmón. En la investigación, que ha analizado a más de 11.000 personas, ha participado el doctor Antoni Agudo, del Instituto Catalàn de Oncología (ICO). Cerca de 4.500 de las personas estudiadas sufrían cáncer de pulmón. El hallazgo, que hoy publica la revista científica Nature , indica que la presencia de las variantes genéticas identificadas en el ADN de un individuo aumenta entre un 30% y un 80% la probabilidad de desarrollar un cáncer de este tipo.

Ese distinto nivel de riesgo equivale a la cantidad de copias de dichos genes que tenga la persona. Así, las que tienen una sola copia de dicha variante genética --según los cálculos, uno de cada dos europeos-- tienen un 30% más de riesgo de sufrir esa forma de cáncer que quienes no disponen de dicha peculiaridad.

Los individuos que presentan dos copias del perfil genético identificado porque lo han heredado tanto del padre como de la madre --uno de cada 10 europeos-- cuentan con hasta un 80% de probabilidades de desarrollar un tumor pulmonar, indican los investigadores. Esta modificación genética es mucho más frecuente en la población de origen étnico europeo que en individuos africanos o asiáticos.

En la región identificada hay tres genes que codifican las proteínas que forman el receptor de la nicotina, lo que supone que su presencia se potencia al consumir tabaco. De hecho, más del 80% de los cánceres de pulmón se atribuyen directamente al puro y el cigarrillo. El resto, a las sustancias que contiene el ambiente y a factores laborales.

PRINCIPAL CAUSA DE MUERTE El cáncer de pulmón es la principal causa muerte por tumor maligno en el mundo, con más de un millón de nuevos casos cada año. El tratamiento de este tumor es muy limitado en la actualidad y se calcula que apenas el 15% de los afectados logran sobrevivir cinco años después de ser diagnosticados. La mejor prevención, insisten los investigadores, es evitar el tabaco.

Este hallazgo no influirá en la prevención del cáncer de pulmón, asegura el estudio. La identificación de esta predisposición genética a sufrir un tumor pulmonar no determinará la posible población de riesgo, añade. "Si una persona tiene una copia de esa modificación genética significa que tiene hasta un 30% más de riego de sufrir cáncer de pulmón --explicó Agudo--, pero este dato tiene poca relevancia.