Bidafarma es una cooperativa farmacéutica que se encarga de la distribución de productos sanitarios y medicamentos en todo el país y también a las dos provincias extremeñas. Y es la primera sorprendida de la demanda de mascarillas y geles hidroalcohólicos experimentada en los últimos días ante la expansión del coronavirus. El gerente de la sucursal de Cáceres, Gonzalo Sesma, explica las repercusiones en el sector farmacéutico, llama a la calma ante la alerta social suscitada y alerta de la especulación que existe con estos productos a través de internet.

-¿Se ha convertido en un problema?

-Ahora mismo sí porque hay problemas de aprovisionamiento en todo el país. Tanto las mascarillas como los geles tienen una rotación normalmente escasa en una farmacia. No es algo que se pida de manera habitual. Quizás las mascarillas tienen más rotación pero en periodos estacionales, como por ejemplo cuando comienza la alergia. Pero ahora la alarma social ha disparado en un 3.500% la demanda habitual en ambas referencias, con lo cual ha pillado tanto a los almacenes de distribución como a los fabricantes sin posibilidad de aprovisionar al mercado.

-¿Cuánto tardará la reposición?

-Todos los almacenes estamos contactando con los fabricantes y ahora mismo nos encontramos a la espera de que nos digan cuánto tiempo de media van a tardar. Todavía no tenemos una respuesta de los fabricantes.

-¿Cúántas mascarillas les piden las farmacias estos días?

-Hemos pasado de una demanda diaria de unas 150 unidades a más de 6.000 unidades en un periodo de una semana. Nosotros hemos tramitado peticiones urgentes desde todos los almacenes de unas 25.000 unidades.

-¿Vale cualquier mascarilla para protegerse del coronavirus?

-Es una medida de profilaxis, o sea, protección total no existe. Porque el virus se transmite por aerosoles líquidos, es decir, que una persona infectada cuando habla, tose o estornuda expulsa gotitas respiratorias que otra persona sana respira.En el mercado existen tres tipos de mascarillas: las FFP1 son para partículas sólidas y pueden valer para polución; las FFP2 son para partículas sólidas y aerosoles líquidos y sí tendrían cierto grado de protección, y por último, las FFP3 son para partículas sólidas, aerosoles líquidos y aerosoles orgánicos y estas serían las de mayor grado de protección; el precio varía.

-¿La escasez de estos productos está favoreciendo la especulación?

-Las mascarillas son artículos de venta libre y no están sujetos a un precio de referencia, pero en internet sí hay gente que está utilizando estos productos para especular. Las FFP3 las he visto por internet a 90 euros, prácticamente el doble. Nosotros desde luego no vamos a entrar en ese juego ni vamos a aprovisionarnos ahora de proveedores que no tenemos cotejados que cumplen unos estándares mínimos de calidad.

-¿Qué pasa con las personas que realmente las van a necesitar?

-Es un problema porque son un producto de venta estacional que tiene un pico de subida de venta por la campaña de alergia y no estamos sirviendo. Estamos a la espera de que los laboratorios nos digan si van a ser capaces de atender toda la demanda. Todo esto del coronavirus puede generar un problema de cara a la campaña de alergia.