Los hijos de los dirigentes de los grandes cárteles de la droga colombianos han ampliado el negocio familiar hasta Madrid, donde funcionan cartelitos o versiones en miniatura de aquellos, que son menos violentos, más discretos y que anteponen el dinero a los enfrentamientos con la Policía o con grupos rivales.

Uno de estos cartelitos , que estaba liderado por dos hijas del histórico narcotraficante Martín Fernando Varón, alias Martín Bal , quien controlaba la organización desde Colombia, ha sido desarticulado recientemente en Madrid, con la detención de 22 personas, según informó ayer la Jefatura Superior de Policía de Madrid. Estos minicárteles repiten muchos patrones de sus mentores, pero son menos violentos