Para explicar por qué ese flujo migratorio no se produjo en los 90, cuando Argelia vivía hundida en la crisis y se desangraba en una guerra civil larvada entre los islamistas y el Ejército, el sociólogo Zinedin Zemur señala: "Los jóvenes argelinos han cambiado. La de los 90 es la generación de los hitistes los que aguantan los muros, que era como se llamaba a los chicos que, desempleados, pasaban el día en las calles, apoyados en las paredes, sin hacer nada, viendo la vida pasar. La actual es la generación de los harragas los que queman fronteras, que ya no se conforman con esa actitud contemplativa y se van".